Tita

Hace varios años atras viví con mi tita, ella estaba vieja y no queria salir de su casa, la que no estaba en buenas condiciones, pero como buena Figueroa, terca como mula, tampoco queria que nadie le ayudara ni le arreglara nada. Tenia tambien el mal del cachurero y su memoria ya le jugaba chueco. Para mí siempre fue mi abuela, los martes y/o viernes (o aveces ambos dias) la iba a ver y almorzaba con ella, el cocinar para alguien más, la hacia revivir un poco y yo obviamente, me desentendia de las ollas y cubiertos sucios, lo importante era compartir. Sin embargo, cuando se daba una vuelta por el jardin, yo metia todo lo que alcanzaba al lavaplatos para dejar todo impeque, claro que si me pillaba uff, era la traición máxima. Pero despues del reto y enfado de la tita, se olvidaba y en la once seguia contandome sus historias, las mismas aveces, pero eso era lo que me encantaba. Cuando pasó el tiempo, me fui a vivir con ella, en la casita de atras, que construyo mi papá, ahi vivi desde que naci, es decir, desde que mis padres se casaron, nacio mi hermano y luego yo, y cuando cumplí 6 años nos cambiamos. La idea era mantener acompañada a la tita, porque no estaba muy bien, dejaba el gas de la cocina abierto y era peligroso, ademas no dejaba entrar a nadie, que no fuera yo o mi mamá y porsupuesto, mi hermano el Carlitos, que era su regalon, pero igual lo desconocia aveces. Despues de un par de meses de vivir con la tita, comenzó a depender de mi y a descansar más, se levantaba tarde, hasta que ya no se levantaba. Mi tia Laurita, es enfermera y esta acostumbrada a trabajar con viejitos, venia los fines de semana y pescaba a la tita y la bañaba bien bañada, en 20 minutos ya la tenia con ropa limpia y sequita, mientras yo y mi madre, cambiabamos sábanas y calentabamos la pieza, en esas ocasiones llegaban combos a todas, menos a mí, pero si me llegaban su par de chuchadas, que viniendo de ella eran peor que un golpe. El tiempo paso, la tita estaba vieja, no tenía ninguna enfermedad, estaba deteriorada, pero solo porque tenia muchos años. En sus ultimas semanas, antes de que literalmente la raptaramos y la llevaramos a la casa de mis papás, comenzo a recordar con la claridad de un niño, sus tiempos de juventud y despues los de niñez, historias que tengo en mi cabeza y en papel que jamas borraré, despues ya no hablo mas que lo justo y necesario hasta que murió, un dia durmiendo siesta dejó de respirar y siguio soñando eternamente. Escribo esto, porque anoche soñe con ella estabamos en su casa y hizo su baile característico, el que hacia cuando yo era niña y me animaba a bailar con ella, estaba tan contenta de verla que cuando desperte, me sentí angustiada, por no poder estar con ella, lo bueno es que sé que está feliz.